¿SABES EXPRESARTE EMOCIONALMENTE?

Diana Meza Vargas

El día de ayer, leyendo el periódico, me encontré un artículo bastante interesante,
acerca de analfabetismo emocional y me pareció un muy buen tema para
comentar.
Sabemos que la Real Academia de la Lengua Española, define al analfabetismo,
como “la condición en la que no se sabe leer o escribir”, pero el analfabetismo
emocional tiene connotaciones que van mucho más allá de lo que sería no poder
expresar mis emociones:

  1. Es la incapacidad para entender y manejar mis propias emociones. ¿A qué me
    refiero con entender? me refiero a poder identificar y comprender lo que estoy
    sintiendo y el origen, sin juzgar y aceptándolo. Esa falta de conciencia emocional me puede situar a menudo en terrenos que me metan en problemas. A veces, cuando reacciono de forma desmedida ante cualquier problema, me puedo sentir agobiada y superada por cualquier dificultad, sea pequeña o grande.
  2. La dificultad para comprender las emociones de los demás, intentando ponerme
    en sus zapatos, y verlos con compasión y empatía, hace que me sienta que el
    mundo está en mi contra y no valore todo lo que me rodea. Así mismo, puedo
    llegar a ser incapaz de ver la mirada del otro y sentirme incomprendida, por no
    poder ver realidades distintas a la mía.
  3. Todo lo anterior, puede provocar que mis habilidades sociales se vuelvan muy
    rígidas y aunque aparentemente me pueda desenvolver, me puede llegar a faltar
    sensibilidad y asertividad para crear verdaderos lazos afectivos con los demás, y
    sobre todo con la gente que más me importa.

Ahora que se lo anterior, ¿cómo me puedo expresar emocionalmente?
Primero que nada, debo detenerme y revisar cuál es exactamente la emoción que
estoy sintiendo. No es lo mismo, sentirme molesta, a estar enfadada o a estar
verdaderamente iracunda, por lo que necesito darle nombre a mi emoción,
encontrando la palabra específica para mi sentimiento. Cuanto más definido, más
claridad tendré al expresarme y así podré decirle al otro lo que requiero.
También es importante que cuando se lo haga saber a otra persona lo que siento,
lo exprese desde ahí y no iniciando con la agresión hacia el otro. Es decir:
“Cuando tú haces…, yo me siento……”, en vez de decirle: “Estoy…, porque tu
hiciste…”; eso provoca que la otra persona se sienta agredida y se ponga a la
defensiva.

Otra buena práctica es expresar mis emociones en positivo. Antes de lanzarme a
decir mis emociones negativas, me será útil practicar con alguien de confianza,
diciéndole algo positivo, esto con la finalidad de bajar el nivel negativo de mi
emoción.
Enseguida, es indispensable que nunca trate de olvidar lo que siento. Desde que
somos pequeños, nos han enseñado que las emociones se deben de ocultar o
evitar, pero con el paso del tiempo, nos damos cuenta de que el “ya no llores, no
pasó nada”, sí importa, sí debemos de llorar cuando es necesario y si pasa algo.
Se ha comprobado en múltiples estudios, que reprimir las emociones sólo
produce ira acumulada y a la larga, puede llegar a degenerar en múltiples
enfermedades como el cáncer o la gastritis, entre otras.
También el reprimir mis emociones, puede generar que explote cuando ya no
puedo más, provocando daños irreversibles en todas aquellas personas que me
rodean, incluyendo las que más me importan.
Otra buena actitud es ponerme en el lugar del otro, para mejorar la comunicación,
al empatizar con sus emociones y vivencias. Tomando en cuenta siempre que
debo explicarme y explicar el porqué de mi emoción, ya que esto me ayudará a
que yo me comprenda y el otro me entienda.
Hay que asegurarnos que nuestro interlocutor nos entiende, y ésta puede ser una
herramienta básica, es decir, comprobar que la otra persona recibió mi mensaje,
como yo quería que así fuera, para así clarificar mis intenciones y evitar malos
entendidos; así como agregar algo de humor a mis conversaciones, para aligerar
la sensación o la emoción y poder ver la situación desde diferentes puntos de
vista.
Por último, te recomiendo que visualices mentalmente, previo a expresarte, la
conversación, para así poder estar seguro de mostrar fiel y adecuadamente, lo
que estas sintiendo.

Por ahora, esto es lo que te quería compartir. Espero que estos tips, te sean
útiles, para poder expresarte asertivamente desde tu corazón.

Hasta la próxima.